"Para ti, que llegaste de repente y cambiaste el argumento de esta historia y el de mi vida."

domingo

Siempre había querido escribir una bonita historia de amor, una de esas que no tiene final, una de esas en la que los protagonistas se enamoran perdidamente el uno del otro, comparte los momentos más especiales que una pareja puede compartir. Una de esas historias en las que los sentimientos son los protagonistas y que, pase lo que pase, nunca acaban mal. Y ahora me doy cuenta de que esa historia que siempre he querido escribir, es aquella que yo deseaba vivir. Es la historia que yo quería haber vivido con esos ojos azules.

Quería perderme en tu mirada para siempre, y no volver atrás nunca. Quería mirar tu cara cada mañana, despertarme y verla a mi lado, en paz, durmiendo, tranquilo, con la única preocupación de si yo estaría a tu lado cuando abrieras los ojos. Quería cogerte de la mano y que me prometieras que nunca me soltarías. Quería tenerte conmigo, siempre, a mi lado, y no separarnos nunca. Quería que todas aquellas palabras bonitas fueran para mí, y que ninguna fuera un reproche. Quería que tú me quisieras como yo te quise.

Y ahora me he dado cuenta de nunca va a existir una historia de amor, nunca voy a volver a ver esos ojos azules otra vez, nunca voy a volver a fantasear con que algún día llamarás a mi puerta y me dirás que por fin te has dado cuenta de que me quieres, nunca voy a volver a soñar que mi mano y la tuya se juntarían para siempre. Y es por que las historias de amor no tienen un final, son infinitas, eternas, siempre se recuerdan, de una manera u otra. Pero nuestra historia hace tiempo que tiempo que tuvo un final, y por eso sé que se ha acabado.

1 comentario:

  1. Muy muy muy lindo texto, me sentí totalmente identificada con él... ¿será que algunos nunca podremos vivir una bella historia de amor? ¿estaremos predestinados a admirar la belleza de éstas pero nunca poder disfrutarlas? Es injusto! y que además de eso, tengamos que sufrir.

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